Panamá fue parte de la
Cumbre de Cambio Climático en París, el 30 de noviembre en Francia,
fue como uno de los estados miembros de la “Alianza de Países con
Bosques Tropicales”, de la cual esta integrada por 52 países.
La Cumbre de Cambio
Climático en París concluyó en un tono de trascendencia histórica,
en contraste con el carpetazo y fiasco de la cumbre de Copenhague
hace seis años.
Uno de los principales
ejes fue el compromiso mundial por "mantener el aumento de las
temperaturas por debajo de los 2 grados con respecto a los niveles
preindustriales y perseguir los esfuerzos para limitar el aumento a
1,5 grados".
Este acuerdo es algo histórico ya que los 196 gobiernos se comprometen alcanzar el techo
de emisiones gases invernadero a poner en marcha un mecanismo de
financiación de 100.000 millones de dólares para medidas de
mitigación y adaptación al cambio climático.
Sin embargo el texto
deberá ser ratificado por todos los países antes de mitad de 2016,
sin embargo entrará en vigor hasta el 2020 y será revisado cada
cinco años para que los países pongan al día sus compromisos y se
fijen metas para la reducción.
Los bosques tropicales
absorben el 62% del CO2 de los bosques del mundo, aunque su
deforestación y degradación "suponen el 10% de las emisiones
globales anuales".
Este nuevo acuerdo va
sustituir al protocolo de Kioto, que se adoptó en 1997, y marcará
la hoja de ruta en la lucha contra el cambio climático y la emisión
de gases de efecto invernadero.
Panamá es el único país
que incorpora en su estrategia nacional de gobierno, el cumplimiento
de los cinco componentes de protección, conservación, restauración
y manejo del bosque.
La conservación de los
bosques tropicales se traduce en nuevas oportunidades de desarrollo y
financiamiento para países en desarrollo como Panamá que cuenta con
bosques tropicales, que conservados adecuadamente representan un
reserva de dióxido de carbono para el país y el planeta.